domingo, 24 de mayo de 2009

EMPLEADOS DE HIPERMERCADO SE MANIFESTARON EN RECLAMO POR EL AJUSTE DE LA JORNADA LABORAL


PARANÁ, 17 MAY (APF.Digital)

- Empleados de Walmart se manifestaron ayer frente a sus instalaciones • “Esta empresa no se adecúa a la Ley de Trabajo, y no respeta la jornada laboral”, señaló el titular del Sindicato de Empleados de Comercio, Daniel Ruberto.



El motivo de la protesta es que la firma no respeta la reformada ley de trabajo que establece una jornada laboral de 32 horas semanales y no 36, como “se empecina en mantener este supermercado”, según lo manifestado por el secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio, Daniel Ruberto, a ElonceTV, quien se hizo presente en el lugar en apoyo de los trabajadores.


“En caso de trabajar más de 32 horas, no se arregla con horas extras sino que se debe pagar la jornada completa. Eso es algo que está muy claro en la ley. Hay algunos supermercados que ya lo entendieron y se adecuaron, pero este supermercado se obstina en no cumplir la ley”, aseveró Ruberto.


“Esto es lo que reclaman los trabajadores, que se les paguen 48 semanales o se les reduzcan a 32. Hay más de 150 trabajadores en forma ilegal, que reclaman por la regularización de su situación”, dijo Ruberto.


Por su parte, uno de los delegados de los trabajadores del hiper, manifestó que “hemos elevado un petitorio a la Dirección de Trabajo e incluso dialogamos con directivos de la casa central en Buenos Aires. Pero la respuesta obtenida es siempre negativa, lo que se pretende es dilatar el tiempo y que los trabajadores le regalen horas de su sueldo”.


“Es la única empresa que mantiene esta modalidad porque los otros supermercados han regularizado su situación. Debido a esto estamos en contacto con los compañeros de otras sucursales para informar que se lleva adelante el plan de lucha”, agregó.


Al ser consultado sobre las medidas de fuerza a llevar adelante, Ruberto manifestó que “este es el inicio del plan de lucha. Todavía no hay jornada de retención de trabajo ni paro. La modalidad de la protesta va a depender de lo que decida la directiva de la empresa. Si no cumplen la ley seguramente los trabajadores nos pedirán que profundicemos la protesta”.


Descartó alguna sanción de la Dirección de Trabajo ya que “lo único que podría hacer es dictar una conciliación obligatoria, para que las partes se sienten a negociar. Tenemos esta misma situación en Coto. En vea y Carrefour se solucionó esta cuestión, entonces la pregunta es si unos pueden por qué otros no. Si una empresa de capitales extranjeros se instala en nuestro país se tiene que adecuar a nuestras leyes”, finalizó Ruberto. (APF.Digital)

sábado, 9 de mayo de 2009

"Wal Mart, la empresa más poderosa de todas, prohíbe los sindicatos"


Disculpen la molestia


Por Eduardo Galeano

Quiero compartir algunas preguntas, moscas que me zumban en la cabeza.

¿Es justa la justicia? ¿Está parada sobre sus pies la justicia del mundo al revés?

El zapatista de Irak, el que arrojó los zapatazos contra Bush, fue condenado a tres años de cárcel. ¿No merecía, más bien, una condecoración?

¿Quién es el terrorista? ¿El zapatista o el zapateado? ¿No es culpable de terrorismo el serial killer que mintiendo inventó la guerra de Irak, asesinó a un gentío y legalizó la tortura y mandó aplicarla?

¿Son culpables los pobladores de Atenco, en México, o los indígenas mapuches de Chile, o los kekchíes de Guatemala, o los campesinos sin tierra de Brasil, acusados todos de terrorismo por defender su derecho a la tierra? Si sagrada es la tierra, aunque la ley no lo diga, ¿no son sagrados, también, quienes la defienden?

Según la revista Foreign Policy, Somalia es el lugar más peligroso de todos. Pero, ¿quiénes son los piratas? ¿Los muertos de hambre que asaltan barcos o los especuladores de Wall Street, que llevan años asaltando el mundo y ahora reciben multimillonarias recompensas por sus afanes?

¿Por qué el mundo premia a quienes lo desvalijan?

¿Por qué la justicia es ciega de un solo ojo? Wal Mart, la empresa más poderosa de todas, prohíbe los sindicatos. McDonald’s, también. ¿Por qué estas empresas violan, con delincuente impunidad, la ley internacional? ¿Será porque en el mundo de nuestro tiempo el trabajo vale menos que la basura y menos todavía valen los derechos de los trabajadores?

¿Quiénes son los justos y quiénes los injustos? Si la justicia internacional de veras existe, ¿por qué nunca juzga a los poderosos? No van presos los autores de las más feroces carnicerías. ¿Será porque son ellos quienes tienen las llaves de las cárceles?

¿Por qué son intocables las cinco potencias que tienen derecho de veto en las Naciones Unidas? ¿Ese derecho tiene origen divino? ¿Velan por la paz los que hacen el negocio de la guerra? ¿Es justo que la paz mundial esté a cargo de las cinco potencias que son las principales productoras de armas? Sin despreciar a los narcotraficantes, ¿no es éste también un caso de “crimen organizado”?

Pero no demandan castigo contra los amos del mundo los clamores de quienes exigen, en todas partes, la pena de muerte. Faltaba más. Los clamores claman contra los asesinos que usan navajas, no contra los que usan misiles.

Y uno se pregunta: ya que esos justicieros están tan locos de ganas de matar, ¿por qué no exigen la pena de muerte contra la injusticia social? ¿Es justo un mundo que cada minuto destina tres millones de dólares a los gastos militares, mientras cada minuto mueren quince niños por hambre o enfermedad curable? ¿Contra quién se arma, hasta los dientes, la llamada comunidad internacional? ¿Contra la pobreza o contra los pobres?

¿Por qué los fervorosos de la pena capital no exigen la pena de muerte contra los valores de la sociedad de consumo, que cotidianamente atentan contra la seguridad pública? ¿O acaso no invita al crimen el bombardeo de la publicidad que aturde a millones y millones de jóvenes desempleados, o mal pagados, repitiéndoles noche y día que ser es tener, tener un automóvil, tener zapatos de marca, tener, tener, y quien no tiene, no es?

¿Y por qué no se implanta la pena de muerte contra la muerte? El mundo está organizado al servicio de la muerte. ¿O no fabrica muerte la industria militar, que devora la mayor parte de nuestros recursos y buena parte de nuestras energías? Los amos del mundo sólo condenan la violencia cuando la ejercen otros. Y este monopolio de la violencia se traduce en un hecho inexplicable para los extraterrestres, y también insoportable para los terrestres que todavía queremos, contra toda evidencia, sobrevivir: los humanos somos los únicos animales especializados en el exterminio mutuo, y hemos desarrollado una tecnología de la destrucción que está aniquilando, de paso, al planeta y a todos sus habitantes.

Esa tecnología se alimenta del miedo. Es el miedo quien fabrica los enemigos que justifican el derroche militar y policial. Y en tren de implantar la pena de muerte, ¿qué tal si condenamos a muerte al miedo? ¿No sería sano acabar con esta dictadura universal de los asustadores profesionales? Los sembradores de pánicos nos condenan a la soledad, nos prohíben la solidaridad: sálvese quien pueda, aplastaos los unos a los otros, el prójimo es siempre un peligro que acecha, ojo, mucho cuidado, éste te robará, aquél te violará, ese cochecito de bebé esconde una bomba musulmana y si esa mujer te mira, esa vecina de aspecto inocente, es seguro que te contagia la peste porcina.

En el mundo al revés, dan miedo hasta los más elementales actos de justicia y sentido común. Cuando el presidente Evo Morales inició la refundación de Bolivia, para que este país de mayoría indígena dejara de tener vergüenza de mirarse al espejo, provocó pánico. Este desafío era catastrófico desde el punto de vista del orden racista tradicional, que decía ser el único orden posible: Evo era, traía el caos y la violencia, y por su culpa la unidad nacional iba a estallar, rota en pedazos. Y cuando el presidente ecuatoriano Correa anunció que se negaba a pagar las deudas no legítimas, la noticia produjo terror en el mundo financiero y el Ecuador fue amenazado con terribles castigos, por estar dando tan mal ejemplo. Si las dictaduras militares y los políticos ladrones han sido siempre mimados por la banca internacional, ¿no nos hemos acostumbrado ya a aceptar como fatalidad del destino que el pueblo pague el garrote que lo golpea y la codicia que lo saquea?

Pero, ¿será que han sido divorciados para siempre jamás el sentido común y la justicia?

¿No nacieron para caminar juntos, bien pegaditos, el sentido común y la justicia?

¿No es de sentido común, y también de justicia, ese lema de las feministas que dicen que si nosotros, los machos, quedáramos embarazados, el aborto sería libre? ¿Por qué no se legaliza el derecho al aborto? ¿Será porque entonces dejaría de ser el privilegio de las mujeres que pueden pagarlo y de los médicos que pueden cobrarlo?

Lo mismo ocurre con otro escandaloso caso de negación de la justicia y el sentido común: ¿por qué no se legaliza la droga? ¿Acaso no es, como el aborto, un tema de salud pública? Y el país que más drogadictos contiene, ¿qué autoridad moral tiene para condenar a quienes abastecen su demanda? ¿Y por qué los grandes medios de comunicación, tan consagrados a la guerra contra el flagelo de la droga, jamás dicen que proviene de Afganistán casi toda la heroína que se consume en el mundo? ¿Quién manda en Afganistán? ¿No es ese un país militarmente ocupado por el mesiánico país que se atribuye la misión de salvarnos a todos?

¿Por qué no se legalizan las drogas de una buena vez? ¿No será porque brindan el mejor pretexto para las invasiones militares, además de brindar las más jugosas ganancias a los grandes bancos que en las noches trabajan como lavanderías?

Ahora el mundo está triste porque se venden menos autos. Una de las consecuencias de la crisis mundial es la caída de la próspera industria del automóvil. Si tuviéramos algún resto de sentido común, y alguito de sentido de la justicia ¿no tendríamos que celebrar esa buena noticia? ¿O acaso la disminución de los automóviles no es una buena noticia, desde el punto de vista de la naturaleza, que estará un poquito menos envenenada, y de los peatones, que morirán un poquito menos?

Según Lewis Carroll, la Reina explicó a Alicia cómo funciona la justicia en el país de las maravillas:

–Ahí lo tienes –dijo la Reina–. Está encerrado en la cárcel, cumpliendo su condena; pero el juicio no empezará hasta el próximo miércoles. Y por supuesto, el crimen será cometido al final.

En El Salvador, el arzobispo Oscar Arnulfo Romero comprobó que la justicia, como la serpiente, sólo muerde a los descalzos. El murió a balazos, por denunciar que en su país los descalzos nacían de antemano condenados, por delito de nacimiento.

El resultado de las recientes elecciones en El Salvador, ¿no es de alguna manera un homenaje? ¿Un homenaje al arzobispo Romero y a los miles que como él murieron luchando por una justicia justa en el reino de la injusticia?

A veces terminan mal las historias de la Historia; pero ella, la Historia, no termina. Cuando dice adiós, dice hasta luego.


http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-124547-2009-05-08.html

Rechazo a instalación de Wal-Mart en ciudad de la Patagonia argentina


FM Gente de Radio de la ciudad patagónica de Bariloche, al sur de la Argentina, informó sobre las intenciones de una de las multinacionales más grandes del mundo, Wal-Mart, de instalar una sucursal en el lugar.












NOTA CON AUDIOS



La radio comunitaria participó de la audiencia pública donde se presentaron los argumentos a favor y en contra del mega emprendimiento de la firma estadounidense.
Wal-Mart se instaló en Argentina durante la década del 90´, y desde entonces ha sido denunciada por ejercer políticas anti sindicales, violación a los derechos laborales, destrucción de economías familiares, entre otras prácticas.

El proyecto para la ciudad patagónica tendría una superficie de 6 mil metros cuadrados sobre un terreno de 20 mil metros cuadrados, con un fuerte impacto socio ambiental, según detalló FM Gente de Radio.

Durante la audiencia pública se encontraron representantes de la firma estadounidense e integrantes de la asociación ecologista PIUKE de Bariloche.

Sergio Vázquez de la organización patagónica puntualizó que la oferta laboral de Wal-Mart no se compara con la desocupación que generará, ya que provocará la desaparición de las pequeñas economías.

Detalló que en el barrio donde se instalaría (El Frutillar), las economías son familiares, "las despensas alimentan a todas las familias, son lugares donde la gente se encuentra y se conoce, son lugares donde los vecinos compran lo necesario sin estar expuestos a tentaciones provocadas por el bombardeo de la publicidad. Estos comercios minoristas desaparecerán".

Por su parte, los representantes del área de asuntos públicos de Wal-Mart, consideraron la instancia de la audiencia pública como "positiva" y argumentaron que se habilitarían 120 puestos de empleos directos, comprometiéndose a cubrirlos con mano de obra local y que darían apoyo a las actividades comunitarias.

La sucursal de la multinacional en Bariloche llevaría el nombre de "CHANGO MAS", rotulación utilizada por la firma cuando se instala en sectores populares.(PÚLSAR/Gente de Radio)


rt
08/04/2009





Audios disponibles:

Sergio Vazquez, Integrante de la Asociacion Ecologista PIUKE (Wal mart en Bariloche)
01 min. 29 seg. (698 KB) archivo mp3



Sergio Vazquez, Integrante de la Asociacion Ecologista PIUKE (Que modelo de ciudad se quiere)
01 min. 37 seg. (759 KB) archivo mp3



Sergio Vazquez, Integrante de la Asociacion Ecologista PIUKE (Wal mart no es un vecino mas)
29 seg. (233 KB) archivo mp3


http://www.agenciapulsar.org/nota.php?id=14775

Cristina y los derechos humanos


En coincidencia con los 60 años de la Declaración
Universal de los Derechos Humanos de la ONU, el gobierno de Cristina cumple su primer año de gestión. Una ocasión para hacer un balance del "Gobierno de los derechos humanos": repasando algunos de los principios de la ONU y las políticas de Estado de nuestro país, sabremos cuál es la vigencia de los derechos del hombre en la era K.


"Me siento orgullosa de poder mirar al mundo y que el mundo nos mire como ejemplo de plena vigencia de los derechos humanos".

Cristina Fernández de Kirchner, 1/04/2008.


Algunos sectores retrógrados suelen utilizar la expresión "los de los derechos humanos", cuando señalan con desprecio a los luchadores sociales. Néstor Kirchner, sin embargo, convirtió el tema en uno de sus caballitos de batalla; y revisando las responsabilidades del Estado durante la última dictadura militar supo convertir a varios de los principales dirigentes de los organismo históricos en referentes de su movimiento político. Cristina Fernández estableció una continuidad en este sentido, y cada vez que puede reitera que los derechos humanos y la distribución de la riqueza son prioritarios en su política de gobierno. Para cotejar los deseos presidenciales con la realidad, echamos un vistazo por algunos pasajes de la declaración de la ONU sancionada el 10 de diciembre de 1948.

En su artículo 5, la declaración de la ONU afirma que "nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes". En la Argentina desde 1983 rige el sistema democrático. Pero desde esa fecha a la actualidad 2468 personas murieron en manos de las fuerzas de seguridad dependientes del Estado. Desde el 25 de mayo de 2003, cuando el proyecto kirchnerista llegó a la casa rosada, los casos registrados suman 976, de los cuales 134 ocurrieron en los 10 meses transcurridos en este año 2008 bajo la presidencia de Cristina Fernández. La mayoría de estos casos son jóvenes y de bajos recursos. En las causas judiciales se confirmaron centenares de tormentos, torturas y vejaciones practicados en el interior de los edificios oficiales y de manos de los agentes del Estado. De manera que quienes deben velar por la seguridad con la fuerza de la ley en una mano y la vigencia de los derechos humanos en la otra, son responsables de casi 2500 asesinatos en democracia. Quizás dentro de 30 años un gobierno de recambio reconozca a estos muertos anónimos y les levante un monumento o un museo en su memoria.

Otro de los artículos de la declaración de la ONU de 1948 afirma que "nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, al tiempo que la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas". Sin embargo Mailén, una nena de 16 años, podría confirmar una y mil veces que eso no se cumple. Ella es boliviana y trabajó dos años en un taller textil ubicado en Buenos Aires, donde le pagaban $ 1,30 por cada pantalón de jean que confeccionaba. Una prenda que no muy lejos de ese mismo taller se oferta a $ 70 en las vidrieras. Luego de dos años de trabajar en las penumbras del salón clandestino montado en un garaje, decidió denunciar a su empleador por medio de los abogados de la ONG La Alameda, quienes ofrecen protección a los inmigrantes y luchan contra la trata de personas y el trabajo esclavo. Mailén tuvo un hijo hace un mes. Mientras lo llevaba en su vientre, se pasaba quince horas en la máquina de cocer. Su marido, quien también trabajó en el taller clandestino, registró las condiciones en las que vivían en un video que será usado como prueba de denuncia a partir de ahora, cuando se animaron a pedir ayuda. Según la ONG La Alameda solo en Capital Federal hay dos mil talleres clandestinos.

A partir del incendió que acabó con un taller textil el 30 de marzo de 2006, en el que murieron 6 personas ( 5 de ellos niños de entre 3 y 15 años), el conflicto llegó a los grandes medios y el gobierno pareció asumir la gravedad del asunto. En pocas semanas fueron cerrados 900 talleres con una clausura administrativa y hasta un funcionario se animó a prometer que en 90 días acabaría con el trabajo esclavo. Pero de esas 900 clausuras, el 90 por ciento fue violada a los pocos días y los talleres volvieron a funcionar como si nada, según el vocero de La Alameda. El tema ya no integra las prioridades del gobierno y quedó relegado a un margen de la agenda oficial. Las cámaras de TV y las tapas de los diarios ya no distinguen cuál de sus anunciantes somete a sus trabajadores. Los talleres siguen produciendo a $1,30 por prenda y los esclavos siguen siendo miles y miles. Según La Alameda, quienes trabajan en talleres clandestinos en condiciones de esclavitud en la ciudad de Buenos Aires, suman más de 20 mil personas. Ellos reciben más de 20 denuncias semanales por sometimiento.

El pasado 8 de agosto, la presidenta Fernández afirmó: "Tenemos que generar mejor trabajo, trabajo que no esté en negro, trabajo que sea bien remunerado, trabajo donde se respete la dignidad de todas y de cada una de las personas". Claro que no hablaba de los esclavos de la industria textil porteña. Pero tampoco se refería a los miles de nuevos empleados de la multinacional estadounidense Wal-Mart.

Wal-Mart es en la actualidad el principal empleador privado en Estados Unidos con más de 7.400 tiendas y más de 2 millones de empleados en todo el planeta. En la Argentina se instaló en 1995 y tiene actualmente 21 sucursales en distintos puntos del país. Si bien la declaración de los derechos del hombre afirma en su articulo 23, inciso 4, que "toda persona tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus intereses", la empresa fundada por Sam Walton expulsa a aquellos empleados que intentan organizarse. La prestigiosa organización de derechos humanos Human Rights Watch elaboró un informe donde denuncia a la firma norteamericana por su política corporativa para mantener sus tiendas libres de sindicatos y la reconocida revista estadounidense Multinacional Monitor la integró en la lista de las "diez peores corporaciones" en el 2004. En nuestro país, el titular de comisión de trabajo de la Cámara de Diputados Héctor Recalde, miembro del bloque oficialista, reconoció que Wal-Mart ha violado la Ley Antidiscriminatoria y el Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo, ambos vigentes en nuestro país. Sin embargo, la presidenta Fernández y su marido festejaron cel 25 de septiembre de 2007 con sonrisas y un brindis, una nueva inversión que la compañía está realizando en Argentina, creando 3000 nuevos puestos de trabajo con derechos recortados.

Al cumplirse 60 años de la declaración de la ONU, su vigencia se complementa con las nuevas definiciones que aporta la legislación universal. Una de esas definiciones afirma que los derechos humanos son una sumatoria de los derechos sociales, culturales y económicos, al tiempo que sugieren una equitativa distribución del ingreso. Esta sugerencia fue acogida por la Presidenta, quien a lo largo de este 2008 regresó al tema una y otra vez durante sus discursos. "Saludo a este proyecto político de inclusión social, de redistribución del ingreso, de la vigencia irrestricta de los derechos humanos, que por primera vez llega a mi país, la Nación Argentina", pronunció la Presidenta el 1° de agosto. Pero al llegar a su primer año de gestión, las cifras oficiales que permitirían comprobar si existe realmente una distribución equitativa de los ingresos, quedan sujetas a la disposición del cuestionado INDEC. Algunos datos alternativos surgen del trabajo de un grupo de economistas del Instituto de Estudios y Formación de la Central de Trabajadores Argentinos. Ellos afirman que el salario real y las condiciones de vida de los trabajadores mejoraron, pero no su participación en la distribución del ingreso, debido a que el Producto Bruto Interno del país creció por encima de la masa salarial. Esto significa que aumentó la actividad financiera, pero ésta no fue acompañada por una distribución. Según los profesionales el índice actual de pobreza es del 31,6%, que significa más de 12 millones de personas. También señalan que en el 2008 la pobreza aumentó 1,3% respecto al semestre anterior y 4,7% en comparación con el primer trimestre del 2006. Sus sondeos señalan que un 10,8% de la población, más de 5 millones y medio de personas, viven en la indigencia.

El próximo 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, será una jornada de aniversario y balance. Una invitación a establecer la distancia entre el discurso y la realidad. Entre la vigencia y la violación.

Federico Randazzo
Esteban Aguirre
Estefanía Alves
Lourdes Landeira
Cecilia Iglesias

Comentarios: contenidos@eter.com.ar

Discriminación laboral: Gremialistas y mujeres son los más perseguidos

Irina Santesteban
La Arena

Grandes empresas como Wal Mart o Telefónica han sido denunciadas y hasta condenadas judicialmente por discriminación laboral. La actividad sindical del trabajador es la causa más frecuente y le sigue la discriminación por razones de género.

Según el artículo 1º de la ley 23.592, discrimina aquél que '... arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o de algún modo menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igualitarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional'. Y establece como sanción que el discriminador '... será obligado, a pedido del damnificado, a dejar sin efecto el acto discriminatorio o cesar en su realización y a reparar el daño moral y material ocasionados'. Por último, esta norma considera 'actos u omisiones discriminatorios' aquellos que están determinados por motivos de 'raza, religión, nacionalidad, ideología, opinión política o gremial, sexo, posición económica, condición social o caracteres físicos'.

En el campo del trabajo, también son variados los motivos por los cuales un trabajador puede sufrir discriminación, pero los casos más frecuentes, o los más denunciados, tienen que ver con la actividad político-sindical y con cuestiones de género.

Laura Greppi era empleada de Telefónica de Argentina y fue despedida 'sin causa' según la multinacional española, aunque en realidad el motivo de su cesantía había sido un mail que había enviado a sus compañeros de trabajo, convocándolos a realizar acciones de solidaridad pacíficas con los empleados de Aerolíneas Argentinas, que se encontraban en conflicto. En 2005, Greppi obtuvo un fallo favorable de la Sala IX de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, quien ordenó a Telefónica la reincorporación de la trabajadora despedida, más una indemnización por los agravios.

En otro fallo de la misma Cámara, pero de la Sala X (autos: 'Savino c/Telefónica') los jueces afirmaron que la patronal 'imprimió un trato discriminatorio sobre los coaccionantes por la participación activa que éstos desplegaban dentro del ámbito sindical y gremial, y por ello, abusando de los poderes de dirección, organización y disciplinarios, les impidió la realización de horas extras, como así también que utilizaran las herramientas de trabajo con la disponibilidad y habitualidad que lo hacía el resto de sus compañeros con igual categoría y tareas'.

Wal Mart, la primera

La empresa que a nivel nacional y mundial se lleva el 'primer premio' por su perfil antigremial, es la cadena norteamericana de supermercados Wal Mart, con 1,5 millón de empleados en todo el mundo.

En EEUU se tramitan decenas de demandas contra esta empresa en los tribunales por discriminación de género, pues dos tercios de sus empleados son mujeres, pero menos del 10 por ciento de sus gerentes lo son.

Según Gustavo Castro Soto y Ryan Zynn, del Centro de Investigaciones Económicas y Políticas de Acción Comunitaria (Ciepac), en su artículo 'Wal Mart, la trasnacional de la pobreza', existen otras demandas fundadas en desigualdad salarial y por la contratación de inmigrantes mexicanos sin seguro social y sin pagarles horas extras. En marzo de 2005, Wal Mart pagó una multa en EEUU de 13 millones de dólares por tener cientos de empleados latinos (sobre todo mexicanos) no documentados, trabajando bajo condiciones semiesclavas.

En 2003 la revista The New York Times afirmó en una editorial que la 'walmartización de la fuerza laboral amenaza con empujar a miles de estadounidenses a la pobreza'. En países del Tercer Mundo, Wal Mart es acusado de abusar del trabajo infantil y sin descanso, en horas de clase escolares, sin tiempos para almuerzo y sin pago de horas extras.

En Argentina, la política de persecución gremial de esta cadena supermercadista fue denunciada por el diario Página 12 a mediados del año pasado y provocó que en el Congreso, la Comisión de Legislación del Trabajo, presidida por el diputado del Frente para la Victoria y abogado de la CGT, Héctor Recalde, citara a directivos de Wal Mart por entender que estaban violando el art. 47 de la ley 23.551, que protege a los trabajadores contra las prácticas antisindicales de las empresas.

Los trabajadores perseguidos por Wal Mart a causa de su militancia gremial, habían denunciado que la máxima autoridad en materia de seguridad de la empresa es Alfredo Oscar Saint Jean (h), militar que tuvo actuación durante la dictadura en Bahía Blanca, Tandil, Azul y en Tucumán bajo las órdenes de Bussi.

Helados sexistas

Para quienes gustan de los famosos helados Freddo, deben saber que esta empresa también fue condenada en Buenos Aires por la Cámara Nacional Civil, por discriminación por razones de género. El fallo ordenó a los directivos de Freddo a tomar sólo empleadas mujeres durante el tiempo necesario para equilibrar su planta de personal, pues al momento de la demanda tenía 650 empleados varones y sólo 35 mujeres. La empresa fue obligada a presentar cada año en Tribunales un informe sobre sus contrataciones, pero desobedeció la orden judicial y debió pagar una multa de 4 mil pesos, más 300 por cada día que transcurriera desobedeciendo la orden judicial. El fallo fue el primero que resolvió un caso colectivo antidiscriminatorio, en defensa de la igualdad de género y el primero contra una empresa privada.

Según el Instituto contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), la mayoría de las denuncias por discriminación en el ámbito del trabajo obedecen a motivos políticos e ideológicos -en general por actividad gremial- y, en segundo lugar, por causas de género.

En algunos casos, como en el servicio doméstico, existe la llamada 'discriminación positiva', cuando se busca emplear a personas de una nacionalidad determinada, por ejemplo, a inmigrantes peruanas o bolivianas para trabajar en casas de familia o para el cuidado de niños. En este caso, la discriminación se produce contra las trabajadoras argentinas, a quienes se las considera más 'conflictivas'. Es que las mujeres de aquellas nacionalidades, ya sea por problemas migratorios o por tener familiares a quienes mantener en sus países de origen, serían menos exigentes a la hora de reclamar por sus derechos.

Otra forma muy frecuente de discriminación, pero poco tratada por los especialistas en derecho laboral, es la que se produce por razones de edad. La Ley de Contrato de Trabajo en su art. 17 la prohíbe, pero la Ley contra la Discriminación no la considera una causal de segregación.

En EEUU existe la Age Act (Ley contra la Discriminación por Edad), que integra el conjunto de leyes que protegen los derechos civiles, por la cual una empresa no puede despedir, negar un ascenso o no tomar a una persona mayor de 45 años, sin explicar muy bien los motivos de ese despido o negativa. De lo contrario, se presume que hubo discriminación y se puede condenar a la empresa a una indemnización sin tope.

En Argentina, ésta es una causa muy frecuente de segregación laboral, sobre todo a partir de las políticas flexibilizadoras instrumentadas en los ´90. Es que por imperio de la precarización laboral, las empresas prefirieron contratar a trabajadores jóvenes que, aunque no tuvieran experiencia laboral estaban dispuestos a tolerar largas jornadas por menos salario y con menores beneficios sociales.

Como conclusión, aunque las empresas y el propio Estado violen la ley que sanciona la discriminación, los trabajadores deben exigir su cumplimiento, ya sea con acciones gremiales, judiciales o por la vía de la denuncia periodística.


Fuente: lafogata.org

¿Quién es Cavalieri?




Por Lucho Aguilar

“Compañero y querido amigo Presidente, Doctor Carlos Saúl Menem (...) La Argentina ha realizado un profundo proceso de transformación, que la va colocando en el mundo. Esto ubicó a nuestro país en condiciones de atraer inversiones. Inversiones que ingresaron con nuestras leyes laborales y con estos dirigentes sindicales.” Discurso de Armando Cavalieri del 30 de septiembre de 1998.

Arrancó mal - A principios de los ’70, una denuncia por estafa llevó a su expulsión del sindicato. Pero volvió... para hacer millones. La dictadura no fue un escollo, sino un trampolín. Junto a Triacca, encabezó la Comisión Nacional del Trabajo. Cuando las bases presionaron a los dos paros generales (abril de 1979 y julio de 1981), la CNT se encargó de carnerear las medidas que había convocado “los 25”, liderados por Ubaldini y Digón.
Preguntale a Cavalieri – Con Alfonsín, asumía en el SEC Capital y fundaba el grupo de “los 15”. El Gitano se encargó de negociar ministros, leyes y planes económicos, que marcaban las relaciones entre el gobierno, los gremios y “los capitanes de la industria”. En 1987 los gremios amenazaban con medidas por un aumento de 780 australes en el salario. El ministro Tonelli les responde: “cómo me van a pedir esa plata si acabamos de arreglar con Cavalieri por 510”.
Armando conducción - La década del ’90 será su apogeo. Cavalieri gana la Confederación Argentina de Comercio. Menem va a tener como primer ministro de Trabajo a su viejo amigo de andanzas, Jorge Triacca, y Cavalieri fue otro fiel soldado de la política antiobrera del menemismo.
Un adelantado - Pero Cavalieri se adelantó al propio menemismo en las reformas laborales. Antes de la aprobación de las leyes, ya había realizado acuerdos negreros con las grandes (y pequeñas) cámaras del sector. Sueldos de miseria, multiplicidad de tareas, jornadas interminables, contratos de aprendizaje. Los grandes supermercados se hicieron famosos por las imágenes de su ambición: las cajeras de un Coto con pañales porque no las dejaban ir al baño, las 36 cajeras de Wal Mart que hicieron desnudar por un faltante, el repositor de Coto que se suicidó por las humillaciones y el despido...
Amigos son los amigos - El 23 de octubre de 1991 se realizó en la Nunciatura Apostólica un ágape. Junto a Menem, Cavallo y María Julia, estaban los recién indultados Videla, Massera y Viola, con el que el Gitano habría tenido largas sobremesas en épocas oscuras. Amalia Fortabat conversaba con el embajador norteamericano Todman, mientras los curas hacían de anfitriones.
Tierra Santa, cuota sagrada - Menem le dio a Cavalieri y su sindicato, la “explotación” de Parque Norte. Por $43 el metro cuadrado y en una concesión por diez años, se quedó con los valiosos terrenos. El Gitano no se olvidó de su amigos, y en un acuerdo con los curas, decidió poner en pie Tierra Santa. Por si fuera poco, de tan creyente Cavalieri decidió que el aporte de los trabajadores al gremio iba a ser “sagrado”. Estableció el aporte obligatorio del 2%.
Don Armando -Su casa en Barrio Norte es una pequeña parte de su patrimonio, siempre difícil de valuar. Se sabe de sus hoteles en Miami en sociedad con Triacca, de su gusto por los caballos y las estancias, como La Federala, aquella que lo llevó al escándalo al amenazar con “tirar al Riachuelo” a un periodista. Suerte para Don Armando: el juez del caso había sido abogado del Sindicato de Comercio. Pero lo podrán acusar por enriquecimiento, pero no por tacaño. En pleno menemismo paseaba en un crucero por el Caribe, en unas vacaciones en las que gastó 100.000 dólares, lo mismo que ganaba un cajero en 20 años de trabajo esclavo. Con la devaluación se tuvo que “ajustar”: en el verano de 2003 estuvo en un spa de Itapema, Brasil, y gastó en unos días “sólo” 13.500 pesos.
Nace una Estrella - Su gran orgullo fue La Estrella, la aseguradora de retiros que puso en pie con la Banca Nazionale del Lavoro, el Trust Bank y el Grupo Juncal. Las empresas comenzaron a aportar un 3,5 % del sueldo para un seguro de retiro complementario. La mitad de ese porcentaje iba a una caja común... que controlan Cavalieri y sus amigos.
Cavalieri sigue al frente de un gremio que tiene hoteles y agencias de viaje que los trabajadores casi ni pueden disfrutar, porque trabajan sin descansos en condiciones negreras. Luego de tres décadas de reinado, las estadísticas dicen que 16 de cada cien desocupados fueron empleados de comercio y un 40% de los mercantiles está en negro. Hasta cuando continúa esta historia depende de los propios trabajadores.

Fuente: www.nuestralucha.org