sábado, 17 de noviembre de 2007


La CTA junto a familiares de las víctimas denunciarán masacre en la Penal de Santiago

En la sede de la CTA Naciónal se realizó la presentación de denuncias e irregularidades en el Penal de Varones de Santiago del Estero en el cual murieron 33 internos. Se responsabiliza a funcionarios provinciales y al Servicio Penitenciario provincial. Pedidos de justicia e investigación independiente. Denuncias de Torturas y muertes. La Conferencia de Prensa se llevó a cabo en la sede nacional de CTA, ubicada en la calle Piedras 1065 de la Capital Federal , y contó con presencia de familiares, dirigentes de la CTA Santiago del Estero, organismos de Derechos Humanos y miembros de la Mesa Nacional de la Central. La Secretaria de Derechos Humanos de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), junto a familiares de las 33 víctimas que perecieron en el Penal de Varones de Santiago del Estero el pasado domingo 5, denunciaron públicamente como una "masacre deliberada" lo ocurrido en la penitenciaria santiagueña y responsabilizaron directamente a funcionarios y agentes del Servicio Penitenciario provincial, como así también del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Santiago del Estero.

"Entre los hechos que denunciaron están las torturas, golpes y humillación constante de las cuales eran objeto las personas detenidas en ese penal desde hacia mucho tiempo atrás; y la responsabilidad directa comprobada de los guardiacárceles en el inicio del incendio del Pabellón 2 que derivó en la horrible masacre de 33 personas muertas por asfixia y calcinamiento", expresaron de la Secretaría de derechos Humanos de la CTA en un comunicado de prensa. Cabe recordar que los 33 reclusos murieron por quemaduras o asfixiados por el humo al incendiar frazadas y colchones durante el motín, ya que las condiciones de detención eran "infrahumanas" y las parejas de los detenidos padecían vejámenes durante las visitas, como así lo denunciaron familiares, un sacerdote y la defensora oficial de la provincia. Al respecto, Luisa Suárez, defensora oficial de Santiago del Estero, reveló que los presos estaban "muy molestos" por las requisas a las que eran sometidos sus familiares, especialmente las mujeres que debían desnudarse ante el personal de guardia. Asimismo subrayó que durante 2007 ya había presentado ante el Supremo Tribunal de Justicia provincial cuatro denuncias por estas situaciones. En este marco, Carlos Carabajal, cura párroco de la Secretaría de Derechos Humanos del Obispado de Santiago del Estero, denunció que las condiciones de alojamiento dentro de la cárcel "son infrahumanas" y que la unidad está "desbordada totalmente". La situación carcelaria argentina fue definida como "terminal" en un informe presentado en 2006 por la Defensoría del Pueblo de la Nación. El documento subrayaba que "la mayoría de las cárceles del país cuentan con superpoblación existiendo duras condiciones de hacinamiento que nunca terminan de resolverse".